La Defensoría del Pueblo manifestó su
preocupación por el inicio de la huelga médica convocada para mañana 4 de julio
y hace un llamado al Ministerio de Salud (Minsa) como a la Federación Médica
Peruana (FMP) a llegar a concretar acuerdos que eviten la paralización del
personal médico que perjudicará especialmente a la población de escasos
recursos.
Asimismo, recordó que nos encontramos en
temporada de bajas temperaturas y en algunas zonas de nuestro país existen
problemas de salud agudizados por ésta y también por el impacto del fenómeno El
Niño Costero, por lo que una paralización de las labores médicas pondría en
riesgo la continuidad de los servicios, pudiendo afectar la vida o la salud de
las personas.
Si bien, la normativa actual obliga a que
la huelga médica no afecte los servicios esenciales, para lo cual la dirección
de cada establecimiento de salud deberá disponer las medidas conducentes a
garantizar la continuidad de la prestación del servicio y la asistencia del
personal médico, la Defensoría del Pueblo supervisará, en el marco de sus
competencias, que se implementen las medidas conducentes a proteger el derecho
a la salud de las personas que acuden a los distintos servicios de salud, tanto
para su diagnóstico como para su tratamiento.
En consideración a estas apreciaciones,
tanto el Minsa como la FMP deben apostar por el diálogo que permita concretar
acuerdos que determinen una mayor calidad del servicio asistencial, y con ello,
velar por el bienestar de las personas usuarias de los servicios.